Se acerca el verano, una de las épocas más recomendadas para quitar el pañal a nuestros pequeños.
Pese a no existir una base médica que indique que esta estación es la recomendada para la retirada del mismo, las buenas temperaturas y el hecho de no usar tanta ropa, favorecen a la “operación pañal”, siempre y cuando, el pequeño esté preparado para ello y lo hagamos de la manera adecuada.
En este sentido, la Asociación Española de Pediatría (AEP) afirma que no hay una edad establecida para que el pequeño controle completamente los esfínteres, siendo la edad más común entre los dos y los tres años de edad, aunque algunos pueden tardar algo más en hacerlo.
¿Cuándo quitar el pañal a nuestros hijos?
El proceso de dejar el pañal no es solo mecánico. No se basa únicamente en la reiteración de conductas, sino que es necesaria cierta madurez por parte de los pequeños para poder afrontar este nuevo reto. Por eso, el principal punto que hay que tener en cuenta para la retirada del pañal es su madurez, proceso que suele darse sobre los 2 y 3 años.
Por ello, lo primero será entender o saber ver si el niño está listo para comenzar con este proceso, pero ¿a qué señales tenemos que atender?
- Edad: como hemos comentado anteriormente, la edad a la que el pequeño suele tener la madurez suficiente como para realizar esta tarea suele comprenderse entre los 2 y los 3 años.
- Conciencia: ¿el niño nos avisa cuando quiere ir al baño?, ¿Se interesa por los pasos que hay que hacer para acudir al baño? Es decir, ¿te pregunta, acompaña, etc.?
- Pañal seco: ¿puede el pequeño retener la orina por más tiempo?
Todas esas son muestras de que el niño puede estar preparado para comenzar la retirada del pañal.
¿Cómo quitar el pañal?
Es importante destacar que no hay una manera ideal para su retirada. Cada niño y cada familia pueden gestionarlo de una manera diferente.
No obstante, aquí os ofrecemos algunas recomendaciones:
- Crea una rutina: se sabe que los bebés se adaptan bien a las tareas rutinarias, por lo que incorporar una nueva práctica de ir al baño puede ayudarlos a aceptar el cambio más rápido.
- Anímalo a usar el baño, orinal o inodoro: acompáñalo cada poco tiempo, insiste siempre con el mismo ritual para que el niño aprenda a repetirlo de un modo automático.
- Si no quiere, no realizar comentarios negativos: tenemos que evitar forzarlos.
- Pasa del pañal al pañal braguita o calzoncillo de aprendizaje: de este modo, nuestro pequeño tendrá más libertad para subir y bajarlo, pues ayudan al pequeño a desarrollar la habilidad de subirse y bajarse la ropa para utilizar el inodoro.
Este proceso debe ser natural respetando las necesidades y ritmos de cada niño, donde las presiones y las prisas no tienen cabida. Si veis que es un drama, que no es el momento, que habiéndolo intentado durante unos días no hay progresos, no hay problema con ponerle el pañal y volver a intentarlo unos meses más tarde.
¿Necesitas más información?
Solicita información a nuestros especialistas a través de nuestra web: Centro CPM
